¿Quieres empezar a hacer ejercicio? Enhorabuena: incorporar la actividad física a tu rutina diaria te traerá muchísimos beneficios físicos y psicológicos. Sin embargo, lo más difícil es pasar de los buenos propósitos a la acción. 

Todo lo que necesitas para ponerte en forma es contar con una sólida fuerza de voluntad. Ahora bien, ¿cómo pasamos del “quiero empezar a hacer deporte” a ejercitarnos de forma habitual? Para ello basta seguir estos sencillos consejos.

Cómo empezar a hacer ejercicio 

Si estás decidido a ponerte en forma, sería bueno comenzar con hacerte un previo análisis físico para que conozcas cuáles son tus capacidades. En función de los resultados que arroje el mismo podrás diseñar un plan de entrenamiento realmente efectivo y 100 % personalizado.

¿Sabías que puedes empezar con lo de hacer ejercicio sin gastar nada de dinero? No necesitas apuntarte a un gimnasio ni comprar carísimas máquinas. De hecho, ni siquiera tienes que salir a la calle. Actividades como las flexiones, las sentadillas y los abdominales las puedes realizar en cualquier habitación de tu casa

Consejos sobre cómo adquirir el hábito de hacer ejercicio

Realismo y paciencia

Las expectativas irreales sobre tus propias aptitudes y las prisas son, con diferencia, las mayores enemigas de tu motivación. Recuerda siempre que los beneficios de empezar a hacer ejercicio nunca se ven a corto plazo, así que ve despacito y con buena letra.

Desconfía de todo producto, método o persona que te prometa ponerte en forma de forma rápida y sin esfuerzo. Seguro que se trata de estafas que solo te harán perder tiempo y dinero.

Realiza tus actividades de menos a más

Para que el cambio de hábitos no se te haga cuesta arriba y termines por abandonar tu objetivo, es importante introducirte en la actividad física de forma progresiva. De hecho, es más saludable caminar a diario que hacer CrossFit un día y no volver a mover un dedo nunca más. 

Lo de ir poquito a poco no solo está relacionado con tu motivación, sino también con tu propia seguridad. Por eso, tus primeros ejercicios deberían ir destinados a mejorar tu flexibilidad y resistencia a fin de prevenir lesiones. ¡Y no te olvides de realizar calentamiento antes del ejercicio y estiramientos después!

Concibe lo de empezar a hacer ejercicio como un placer

Si quieres aprender el secreto de cómo adquirir el hábito de hacer ejercicio, es fundamental que dejes de verlo como una especie de condena que estás obligado a cumplir. Es un hecho: los seres humanos estamos perfectamente preparados para escaquearnos cuando algo no nos gusta.

La forma más efectiva de convertir el ejercicio físico en un hábito duradero es divertirte con él. Por eso, si te lo pasas mejor jugando al tenis que haciendo pesas, ya sabes el tipo de deporte que debes practicar.

 

En definitiva, todo lo que necesitas para crear el hábito de empezar a hacer ejercicio está más en tu mente que en tu cuerpo. Como ves, mantener alta tu motivación es, en realidad, cuestión de estrategia y de autoconocimiento.